Cielos Nublados

Cielos nublados se posan en la vieja villa,

En la que miles de pensamientos se crearon,

En la que juntos reíamos sin cesar,

Al recordar la forma en que nos conocimos.

Y entre el frio que se posa en la vieja hamaca,

Solamente me quedan tus caricias,

Mientras mueren las dulces palabras,

Que endulzaron las noctámbulas historias.

Entre tanto, con el frio que me mata,

Mi mente me reclama por tu ausencia,

Cuando al cerrar mis ojos miro,

Los momentos hechos melodías.

Cielos nublados, vientos que me ahogan,

Entre sueños que me saben a verano,

Pues te he perdido sin remedio en el vacío,

Cuando nos juramos hacer del amor una leyenda.

Pero ahora que estás lejos de mi vida,

Ni las hadas que pasean vagabundas por mi mente,

Me permiten ubicarte en pensamientos,

Para evitar que tú des media vuelta.

Y este espacio que se vuelve desabrido,

Me castiga con la ausencia y la nostalgia,

De saber que fue mi culpa el que te fueras,

Por el miedo a retenerte en esa puerta.

Y esta villa que de nardos se engalana,

No es más que un desierto que me ahoga,

Cuando al ver la tenue niebla vagabunda,

Ella pierde el colorido que la alegra.

Entre tanto, me pregunta la distancia,

Lo imposible y lo utópico de tu vuelta,

Como si la respuesta fuese pertinente,

Para acabar con esta niebla que me ahoga.

Y yo que sumergido en las tinieblas,

He tirado mi presencia en esa hamaca,

Busco loco en los recuerdos la medida,

La respuesta que me quiten mis tristezas.

Cielos nublados en la vieja villa,

Que no es la misma desde que te fuiste,

Pues tu ausencia se presenta en sus paredes,

Mientras sueño con el día que regreses,

Para poder quitarle así la tristeza que se cierne,

Cuando el cielo que nublado se presenta,

En  la ventana que recuerda tu partida.